Directorio Web gratis ...::: LEJANOS PASOS (por Joce ) :::...: 28/6/09 - 5/7/09

3 jul 2009

UN GRAN SUSTO

Cuando uno cree saber y entender muchas cosas de la vida, pero no llega a creer que lo ficticio puede estar en la realidad. Memo tenia 14 años, y como todo chico de su edad, era una mañana sabatina y para no aburrirse solía buscar a uno de sus amigos (Memo desde ese edad no creía tener el llamado "mejor amigo", sino solo amigos en quien confiar), se alisto con su polito que estaba de moda y sus bermudas bien paja, y como poderse olvidar de su nuevo accesorio, era un reloj que varios meses estuvo pidiendo que sus padre se lo regale, hasta que se lo regalo; no era un gran reloj, pero estaba de moda para esos años (acuático, con cronometro, varios tipo de alarmas, y brújula).

Empezó la caminata para buscar a su amigo Renzo, pero siempre había dos caminos por donde ir, la mas lejana que era la mas segura, porque era bien transitada y no había choros o rateros, que te puedan hurtar lo que lleves; y el otro camino el cual era mas rápido de llegar a casa de Renzo, pero había que tener cuidado porque esa zona se le conocía como el barrio de los Negros-Fumones. Bueno pues Memo opto por el 2do. camino, diciéndose el mismo -Que me va pasar, si ya estoy grande y tengo mis 14 años-.
Mientras iba por el camino comiendo su galleta favorita (charada de maní) vio a un hombre de unos 28 años parado en una eskina del camino, Memo lo ve y muy desapercibido sigue su camino, cuando el hombre le dice:
- Hey chibolo que hora tienes?
- Memo responde, son las 10:15 AM
- El hombre de 28 años le dice: ok, gracias chibolo.

Memo algo molesto y en su pensamiento dice: No soy ningún chibolo pastrulo, tengo ya 14 años y no me creas un niño, cabron!
y siguió su camino, y ya casi llegando a su destino voltea una curva de la calle y de repente alguien le toda del cuello con su brazo y le dice: -Ven acá chibolo webon y siéntate en estas gradas-. Memo estaba desconcertado, pero le hace caso y se sienta con el en las gradas de una casa abandonada; estaba medio asustado y sorprendido porque no sabia quien era dicha persona, cuando voltea a verlo: lo reconoce después de unos segundos; si, era el Hombre de 28 años que unas cuadras atrás, le había preguntado la hora. No sabia que quería ese tipo con el, así que solo lo miraba y respondía lo que le preguntaba.

- Hey chibolo ahora mismo me vas a decir donde esta Juan...
- Memo responde, kien Juan? (haciéndose el desentendido, pero a la vez hacia memoria de kien mierda le hablaba)
- El hombre de 28 años le dice: No te hagas, varias veces te he visto con el caminando por acá, es tu brother, así ke no lo cubras.

Memo pensó que este tipo debe ser uno de esos fumones que para por la zona, y se keria levantar e irse; cuando en eso el Hombre de 28 años, le dice: No te levantes, porke sino te lleno de plomo, y levantando su polo, tenía en la cintura un revolver. En eso momento Memo se quedo pasmado y asustado por lo que podía pasarle si no hacia caso a lo que el Hombre de 28 años le decía.

(...CONTINUARA)

▓▓ PEPE PEPERONI ▓▓

2 jul 2009

Retocame que me gusta

Hay modelos que lo piden como condición. Hay grandes artistas que sin él, y aún a riesgo de parecer una exageración, no pueden vivir sin su magia digital. Es más, dicen los que saben que este artilugio se inventó cuando mi tutor Sigfrido Ciendedos necesitó retocar la foto de su madre que había muerto de risa.

Parece que la señora estaba en su clase de canto cuando le tocó interpretar una canzonetta italiana (¿de dónde será sino siendo una canzonetta?) que le demandaba gran caudal. Tanta fuerza hizo para cantar que en el medio del grito final, se le escapó una flatulencia que sonó a un trombón húngaro afinado en mi menor.

Ella, sorprendida por el sonido que emanó su humanidad, siguió cantando haciendo ritmo con el pie izquierdo al tiempo que seguía con el trombón y su canto italiano.

En el preciso instante del vibrato final, un loro entró volando por la ventana y se le metió en la boca a la madre de Sigfrido. La dama, atragantada, tosió escupiendo al loro quien, seguramente sin entender qué estaba pasándole, salió despedido y pegó en la frente de la profesora que cayó sentada sobre una bandejita de tres cuartos de masas finas que le había dejado el alumno anterior.

Meri Cris Mas de Ciendedos entró en un ataque de risa al ver la situación. Tan repentino fue este súbito estallido que se le desprendió la dentadura postiza y se la tragó. El premolar de marfil se le clavó en la garganta impidiendo el paso del aire causándole la muerte.

Sigfrido no tenía fotos de su mamá así que tuvo que usar la que le sacaron los peritos cuando llegaron a la casa de la profesora de canto. Así como estaba la foto que le dieron no le servía, entonces tuvo que recurrir a sus amigos de la casa de computación de la esquina, al lado de la panadería de Pepe Matusa.

Y de eso se trata todo esto: del Fotoyop. Ese programita para la computadora que hace las delicias de cuanta modelo ande por ahí en busca de fama. Pero la fama cuesta. Y ahí es cuando hay que pagar. Con sudor. Y con otras cosas.

Porque lo barato sale caro. Y si usted no tiene plata para pagar a alguno que sepa usar el Fotoyop en serio, deje la foto como está. Sino, mire lo que le pasó a Jessica Simpson (una cantante de USA) que por ahorrarse unos mangos le pidió a su primito que limpiara de la foto a ese novio molesto al que ya le había colgado la galleta.

Parece que el primito no la tenía muy clara porque le hizo esto:

me pareció ver una linda manito...

Que lo tiró, ¿no?

- - Pepe Galleta - -

30 jun 2009

::.. Sin perder tu sonrisa ..::

Al despertar de ese anochecer tan azotador...
Nunca deje de pensar en tus miradas disimuladas y caricias contra mi pecho....
Nunca pense amar tanto a una persona que llego a mí como una luz tormentosa y abrio mi corazon, para usarlo cuando ella kisiera.

Soñare de tus sueños, jugare con tu cabello, rozare tus risas y me perderé en tu resplandor, creyendo que iluminas y rompes todas las tristezas de un soñador.

Hey despierta!!, parece decirme mi otro amor y solo despertare pues no encontre nadie a mi lado...